Jackie Wilson fue una de las personalidades más influyentes, con una de las voces más dúctiles, con más carisma y excitantes de la era del Rock and roll, no en vano era apodado “Mr. Excitement”.
La enorme efervescencia musical de los años 50 jugó en contra de algunos intérpretes, como Jackie Wilson, que no encontraron al productor que supiese guiar sus carreras por la vía adecuada, lo que resultó en mala elección del material o arreglos poco adecuados. ¿Hasta dónde hubiese llegado Wilson de haber estado en Motown o en Stax, en lugar de Brunswick?.
Fue uno de los cantantes, junto a Sam Cooke o Clyde McPhatter, que utilizaron su pasado en el terreno del gospel para dar cuerpo al soul;un cuerpo pecaminoso, según algunos. Haciendo memoria recordamos como Al Green tuvo que abandonar el cuarteto de gospel familiar al ser pillado por su padre en flagrante pecado: ¡escuchando el tema de Jackie “Baby Workout”!.
Cuando una de las presuntas amantes de Jackie Wilson, Juanita Jones, disparó al cantante y músico el 15 de febrero de 1961, el hecho fue, de algún modo, símbolo de la carrera de un hombre que poseía todo el talento del mundo, pero a quien injustamente la suerte no sonreía.
Sucedió que el arma con la cual Jones había amenazado con dispararse a sí misma, se disparó mientras Jackie intentaba quitársela, lo que dejó al cantante con una herida en el estómago y una bala alojada en la espalda. Wilson fue dado de alta del hospital con el proyectil en su abdomen debido a que estaba alojado en un lugar que no le era peligroso ni fácilmente operable.
Wilson, nacido en 1934, empezó reemplazando a Clyde McPhatter, pero pronto desarrolló su propio estilo como vocalista y músico. El talento de este artista se muestra en todo su esplendor en el single de 1956, “Reet Petite”, en el que hacía vibrar la R de forma impresionante. Más tarde, lo repetía en todas sus actuaciones, donde bailaba extasiado con movimientos imposibles y empapado de sudor.
No obstante, Wilson no escribía sus canciones, por lo que su material dependía del trabajo de otros y probablemente fue por esto que -para desgracia suya- su contemporáneo Sam Cooke obtuvo mayor prestigio, si bien ambos introdujeron la pasión por el gospel en el R&B y por tanto, fueron los precursores de la creación del soul.
Lanzó otros discos de calidad considerable, de entre los que destaca “I Get The Sweetest Feeling”, pero más tarde, el caso del disparo se complicó cuando el IRS le embargó la casa y asesinaron a su hijo adolescente.
Finalmente, en 1986, su sencillo “Reet Petite” llegó a la cima de la lista de éxitos de Gran Bretaña, tras sonar en un anuncio de televisión; pero Wilson ya no estaba en condiciones de saborear el triunfo, pues tras caer de un escenario en 1975, quedó en estado vegetativo y murió en 1984.