El filin (sentimiento) es una corriente literario-musical que inició en Cuba alrededor de 1946. Cantar con filin equivalía a desterrar los viejos moldes para esbozar un panorama optimista de la vida y los sentimientos amorosos. Esta corriente basada en el bolero y el jazz utilizó a la guitarra como instrumento representativo.
La escuela del filin se manifestó en la obra de compositores cubanos como José Antonio Méndez y César Portillo de la Luz; en México, cultivaron esta corriente a partir de 1949 y hasta nuestros días: Vicente Garrido, Álvaro Carrillo, Miguel Pous y Armando Manzanero. Foto: Vicente Garrido.