Amor, odio, miedo… ¿Te imaginas cómo sería no saber identificar ni expresar tus propias emociones? Es lo que les ocurre a las personas que sufren alexitimia.
En 1972 el profesor de Psiquiatría Peter Sifneos introduce el término ‘alexitimia’ (‘a’ –sin-, ‘lexis’ –palabra-, ‘thimos’ -afecto-) para referirse a un trastorno que imposibilita a la persona detectar sus propias emociones y por lo tanto darle un nombre a la hora de expresarlas verbalmente. Es por ello que las personas alexitímicas son incapaces de reconocer y poner nombre a sus emociones.
Tal vez nuestro ex divo de Juárez Juan Gabriel padecía de este problema, pues con canciones tan llegadoras como “Yo no nací para amar nadie nació para mí” o “no me vuelvo a enamorar totalmente para qué”, nos dejó ver que andaba muy triste en el amor.
Y es que sin caer en el drama, puede que la próxima vez que escuchemos a una persona usar estas frases, estemos en presencia de alguien con trastorno neurológico conocido como Alexitimia.
Este trastorno impide a las personas afectadas identificar las emociones que experimentan así como expresarlas verbalmente: por lo que poco a poco pierden la capacidad de amar.
Los seres humanos somos capaces de sentir amor, odio, alegría, miedo, es decir, experimentar sentimientos y emociones, gracias a un cerebro que lo hace posible, así como a relacionar estos sentimientos con estructuras que permiten su verbalización.
Aproximadamente un 10% de la población mundial ha perdido la capacidad de amar y padece Alexitimia, pero la mayoría no lo sabe y lo confunde con malas relaciones.
La importancia de sentir emociones es muy superior a lo que solemos pensar. Las emociones influyen muchísimo en la atención, la memoria y el racionamiento, nos indican qué es lo importante y nos ayudan a tomar decisiones. Cuando no somos capaces de reconocer nuestras emociones, ni de interpretarlas, no podemos utilizar una información que es muy valiosa, lo que hace que sea mucho más complicado tomar decisiones y crear vínculos sociales.
¿Y usted, si nació para amar? ¿Alguien nació para usted?
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