Cada 21 de febrero se celebra el Día Internacional de las Lenguas maternas; esta conmemoración fue proclamada en el año de 199 por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) con el fin de promover la preservación y protección de todos los idiomas que emplean los pueblos del mundo, así como el multilingüismo y la diversidad cultural.
Se estima que alrededor del 43% de las 6000 lenguas que se hablan alrededor del mundo están en peligro de extinción, ya que se ha demostrado que como promedio, cada dos semanas, una lengua desaparece, llevándose consigo la desaparición también de todo un patrimonio cultural e intelectual.
La diversidad lingüística se encuentra cada vez más amenazada con un mayor número de lenguas que desaparecen, por lo que es necesario mantener vivas las culturas, con todos sus rasgos y elementos que la hacen única, así como fomentar el aprendizaje de las lenguas originarias de los pueblos en los diversos niveles educativos.