La poesía es un espacio de libertad y de resistencia, como lo demuestra la escritora Celerina Sánchez. En su más reciente libro Natsiká, une la fuerza de los versos con el blues, esto último con la colaboración del músico Víctor Gally.
Se trata de un audiolibro en lengua ñuu savi, lengua de los mixtecos, quienes se ubican en tres estados: Oaxaca, Puebla y Guerrero. Celerina cuenta que cada región tiene variantes culturales muy importantes.
Dar a conocer a un pueblo a través de la poesía no es un asunto sencillo, mucho menos cuando se incluye una explicación fonética y fonológica. El ñuu savi no es un dialecto, sino una lengua, cree Celerina que al pueblo mixteco desde su denominación se le ha tratado de hacer menos. “Hay quien no tiene idea de que en el país hay 68 lenguas y que muchas están en proceso de desaparición”, enfatiza.
Víctor Gally dice que los promotores no saben si invitarlos a un festival de música o de poesía, pero que cuando los escuchan se quedan sorprendidos. Considera que toda lengua tiene sus melodías implícitas, por eso trabajó de manera cuidadosa con el ñuu savi para respetar lo que decían los poemas de Celerina.
Escuchar un audiolibro como Natsiká permite, como su nombre lo indica, emprender un viaje mediante la cosmogonía de los hombres de la lluvia, que es lo que significa ñuu savi. “Las lenguas solamente son diferentes; no mayores ni menores. Los seres humanos tendemos a categorizar todo” dice la poeta.
El 21 de febrero Día Internacional de la Lenguas Maternas se dará a conocer que el 2020 comenzará un “Decenio de las lenguas” para hablar de los pueblos originarios, de su cultura y su poesía. Este año que inicia es un año para reconocer que “lo que nos hace grandes es la diversidad” como segura Celerina Sánchez.