Las grandes ciudades guardan secretos, rincones, historias que nunca dejarán de sorprendernos, y la Ciudad de México no es la excepción… Muy cerca de la Calzada de Tlalpan, a la altura del Metro Portales, en una de las zonas de mayor movimiento del Sur de la Capital, se esconde un pueblo muy antiguo. Tan antiguo que sus orígenes pueden encontrarse en la época prehispánica. Su nombre original era, simplemente, Ticumac, cuyo significado ha sido interpretado por los investigadores como “lugar de tecomates (vasijas de barro)”. En tiempos virreinales la orden franciscana hizo construir en ese pueblo una pequeña iglesia dedicada a San Simón Cananeo y, gracias a ello, comenzó a nombrársele como lo seguimos conociendo hasta la actualidad: San Simón Ticumac. Hoy, San Simón es un barrio de mucha tradición, que no ha perdido del todo su antiguo ambiente pueblerino. En él se encuentra uno de los salones de baile más célebres de la ciudad: el “California Dancing Club”, y en sus enredadas y atiborradas calles están ubicados tres importantes mercados, uno de abasto, otro de plomería y un tianguis de fierros viejos. Y muchos negocios, como la mercería “La Orquídea” de la que fue dependienta Doña Esthercita, la mamá del escritor Carlos Monsiváis que vivió siempre en este antiquísimo barrio…
Mucho más podríamos seguir contando de San Simón, pero mejor les compartimos nuestro entusiasmo por la reciente aparición del libro “Fiesta Patronal 2016 de San Simón Ticumac”, de la antropóloga, cronista y vecina de San Simón, María de Jesús Real García Figueroa. Este texto reúne investigación, crónica y testimonios y es un cálido recuento de memorias de un rincón entrañable de la Ciudad de México. Su autora estuvo en entrevista en la cabina de Radio México Internacional, te invitamos a escuchar lo que nos platicó

Fotografías tomadas del libro Fiesta Patronal 2016 de San Simón Ticumac