Hace unos días la ciudad de Izamal, ubicada a unos 70 km de Mérida, fue uno de los escenarios del Festival Internacional de la Trova Yucatán 2018. Radio México Internacional estuvo presente en la cobertura del Festival y tuvimos el privilegio de recorrer esta extraordinaria población. Compartimos con los amigos de RMI la charla que tuvimos con el Lic. José Luis Mapén Castellanos, Director de Turismo de Izamal,a quien agradecemos su entusiasmo y sus atenciones.
Izamal es una población de la zona oriente de Yucatán. Su nombre significa, en lengua maya, “rocío que cae del cielo”. Izamal es una ciudad amarilla, y ese es el color que acompaña el ritmo sosegado de sus días. Es un amarillo muy particular: ocre, cálido, abrigador…

Visitar Izamal es toda una experiencia. El ánimo del paseante se ve habitado por multitud de sensaciones. No podría ser de otra manera, ya que se trata de una de las ciudades mayas más importantes y antiguas y de una población majestuosa de los tiempos virreinales.En sus calles se entreveran esas dos realidades y salen al encuentro del paseante a cada momento.
Cuando los conquistadores españoles llegaron a la península de Yucatán, Izamal ya estaba abandonada En sus mejores tiempos fue siete veces más grande que la ciudad actual. Vivió momentos de esplendor y su poder la equiparaba con ciudades tan importantes como Uxmal y Chichén Itzá, pero las guerras lograron acabar con ella.
Los conquistadores españoles levantaron templos de la nueva religión sobre los antiguos asentamientos mayas y el más importante de ellos es el bellísimo convento de San Antonio de Padua cuyo atrio es el más grande de América.
Pero Izamal es también un santuario y lugar de peregrinación desde los tiempos más antiguos. En sus orígenes se le consideró como el lugar de Itzamná, creador de los hombres, los animales y todas las cosas, y esto la convirtió en una ciudad sagrada. Después,en tiempos virreinales, llegó a ella la imagen de la Virgen de la Concepción,que atrajo a muchos fieles y que actualmente es considerada como la Patrona de Yucatán. Por eso en los domingos y los días de fiesta, se mezclan en Izamal los pasos de los visitantes más diversos: las familias que llegan al templo desdelos pueblos de los alrededores y los viajeros que se sienten atraídos por los múltiples encantos del lugar.
Historia, tradición, belleza,alegría y buenas experiencias acompañan a quien visita Izamal. Tiene todo lo que un viajero atento necesita. Hay diferentes rutas en el camino de esas emociones: talleres artesanales, bellezas naturales, leyendas, arquitectura,calles hermosas, hospedaje de muy diversos precios y magnífica comida (cabe mencionar que uno de los restaurantes más reconocidos de alta cocina yucateca,el Kinich, se encuentra en Izamal).Cuando tengan oportunidad de visitar Izamal no duden en hacerlo. Y, sobre todo,lleven el ánimo bien dispuesto y todos los sentidos muy abiertos.