Una nieve de mantecado con un merengue…, o mejor, una champola con helado de mamey y un pinono…, o tal vez un arrollado, o un cono envinado, o un helado de crema morisca, o uno de plátano, de mango, de coco, de zapote… Hay para todos los gustos y el cliente puede tener la seguridad de que, elija lo que elija, el sabor siempre será excelente, las materias primas serán de primera y la preparación llevará los secretos de fórmulas y recetas antiguas, que han sido probadas, y aprobadas, por varias generaciones de meridanos.
Estamos en la “Heladería y Sorbetería Colón”, en los portales de la plaza central de Mérida, un negocio abierto al público desde el año 1907. Esta nevería es un lugar singular, de esos que se convierten en parte indispensable de una ciudad, en sitio de recuerdos comunes para sus habitantes y en visita obligada para los viajeros.
Nadie sale decepcionado de la Nevería Colón, porque “calidad” y “tradición” son las dos palabras sobre las que se ha construido su bien ganada fama y, día a día, “calidad” y “tradición” siguen siendo los dos preceptos sobre los que se mantiene intacto su prestigio.
Este negocio nunca ha dejado de pertenecer a la misma familia, los descendientes de Don Vicente Rodríguez y Peláez, un asturiano llegado a la península yucateca a principios del siglo XX. Ellos, sus hijos, sus nietos, sus bisnietos, han sabido cuidar una herencia muy compleja, no sólo la que tiene que ver con un patrimonio económico sino, sobre todo, la que han formado juntos a través del tiempo y que está tejida con el cuidado delicado de los sabores, con la selección minuciosa de las frutas, con el punto preciso de los merengues, con el respeto a las recetas antiguas, con los aromas, con la frescura, con la memoria que se guarda en cada bocado.
¡Larga vida a la “Heladería y Sorbetería Colón” de Mérida, Yucatán! Larga vida, porque en estos tiempos de franquicias y golosinas idénticas unas a las otras, ha sabido apostar por los buenos sabores: los que nos dan identidad, los que nos construyen, los que acompañan nuestras mejores y más auténticas historias.
Hace unas semanas platicamos, en Mérida, con Marian Alpiza Rodríguez, una de las integrantes de la familia dueña de la “Nevería y Sorbetería Colón”. Les invitamos a escuchar esta conversación en el audio que se encuentra bajo estas líneas.