El 16 de junio de 1923, se inauguró la Primera Feria Internacional de la Radio, promovida por la Liga Central Mexicana de Radio. Como actividades promocionales, la compañía cigarrera del Buen Tono, S. A., lanzó a la venta una marca de cigarrillos “Radio”. Durante ese mes, iniciaron las transmisiones de prueba de la radiotelefónica del Buen Tono.
El 14 de septiembre de 1923, se realizó la primera transmisión de la emisora de la Compañía Cigarrera del Buen Tono, CYB (después XEB).
El concierto inaugural realizado el 15 de septiembre, incluyó canciones asturianas, solos de gaita y un “mensaje” de Alfonso XIII, monarca de España (utilizando un disco fonográfico que el rey fijó en la marca “ Odeón” española en 1920).
Durante la Conferencia Internacional de Comunicaciones, celebrada en Washington, D. C. en 1929, las siglas "CYB" de la radiodifusora del Buen Tono cambiaron a "XEB", siguiendo los lineamientos que se dictaron, donde por decreto se le asignaron a México las siglas XE para identificar sus estaciones radiodifusoras.
Inicia las operaciones XEBT, la emisora de onda corta de la XEB
En 1942 las perspectivas del Buen Tono eran optimistas; se anunció la inauguración de cinco estudios de transmisión, dos teatro-estudios, un moderno equipo transmisor que lograría alcanzar una potencia de 100,000 watts efectivos en antena y la contratación de artistas de primera línea, que reforzaron la imagen de la estación.
Para finales de los años cuarenta, XEB y XEBT Onda Corta dejaron de ser las “Estaciones del Buen Tono” para convertirse en “Las emisoras de América en México”.
En 1950, el slogan de XEB y XEBT (onda corta), era “Las Emisoras de América”, ya sin alusión a la compañía cigarrera del Buen Tono, a la que aún pertenecían, incluso ocupando el mismo inmueble. La “B” se encontraba ya ubicada en los 1220 kilohertz de Amplitud Modulada, y transmitía con 100,000 watts, mientras que la onda corta, situada en los 9625 kilohertz, mantenía una potencia de 10,000 watts efectivos en antena.
En 1957, don Emilio Azcárraga Vidaurreta adquirió la concesión de XEB, creando la empresa “Radio Satélite, S. A.”. Para ese tiempo tenía las concesiones de: XEW, XEQ, XERPM, XEB y XEDF, cuyo slogan de identificación era: “Los cinco puntos de oro de la radio”. Fue precisamente durante este lapso cuando el popular locutor Alejandro Rodríguez Morán “El sheriff” le aplicó el sobrenombre de “La B Grande de México”.
Los años sesenta fueron los tiempos de una XEB dedicada a las complacencias, la difusión de eventos deportivos y el mantenimiento de espacios musicales a tono ranchero, con música grabada y “en vivo”; radio sin compromisos culturales, aunque con una tremenda carga histórica, que se mantuvo de 1967 a 1983.
En 1962, cerró sus operaciones XEBT, la emisora de onda corta cuyas actividades dieron inicio en 1933.
Para 1967, la concesión de XEB fue adquirida por Rogerio Azcárraga Madero, con las que integró el Grupo ORO. La cabina de XEB fue trasladada al inmueble de Dr. Rio de la Loza y Avenida Cuauhtémoc. Durante esta etapa, al cambiar la razón social por Radio Fórmula, todas las emisoras fueron enumeradas, conforme a su posición en el cuadrante; a XEB le asignaron el nombre de “Radio tres”.
Durante la etapa en que XEB perteneció a Radio Fórmula, algunos locutores que identificaron la emisora, fueron: Carlos Fuentes, Jorge Kellog, Armando Réndiz y José Víctor Rodríguez.
El 21 de diciembre de 1978, el manejo de XEB y otras dos emisoras de Radio Fórmula (XERPM y XEMP), fue asumido por el Gobierno Federal. Este hecho histórico definió, cuatro años más tarde, la creación de un organismo público descentralizado como titular de dichas estaciones. Entre tanto, para manejar XEB, a partir de 1979 se creó la concesionaria Compañía Nacional de Radiodifusión, S. A., coordinada por la Dirección General de Radio, Televisión y Cinematografía, de la Secretaría de Gobernación.
A partir de 1983 se encargó de su manejo el gobierno federal, convirtiéndose en la “estación piloto” del recién creado Instituto Mexicano de la Radio.
A pesar de los cambios estructurales que ha tenido XEB bajo la administración del IMER, la memoria popular tiene bien ubicado el prestigio de la emisora como la más antigua de Latinoamérica y como portadora de valores históricos y culturales.
Los programas más destacados de XEB, durante 1983-1989, fueron “Comentando el noticiario”, “Foro obrero”, “Historia musical de México”, “La B en el campo”, “La canción mexicana embajadora ante el mundo”, “Línea nocturna” , “Mujer”, “Palabra y música de México”, “Serenata”, “Tardes románticas” , “Una hora con Agustín Lara”, “Voces y guitarras”.
En 1987, una mujer ocupó por vez primera un puesto como locutora en XEB: Olga Romero Gamero. A partir del año 2001, se integraron Claudia Ramírez, Margarita González, Ivonne Castillo y Susana Rodríguez. En cuanto a las comentaristas, el número resulta mucho más numeroso, ya que desde la creación del IMER.
En la lista de programas transmitidos durante 1991 y 1993, se observa un afán por enriquecer y diversificar todos los horarios, siempre bajo un concepto cultural; algunos títulos son: “Las canciones más bonitas de ayer y hoy”, “Historia musical de México”, “La hora del futbol”, “Mujer”, “La B en el campo”, “Panorama cultural”, “Teatrofilia”, “El noticiario”, “La magia del cuento” y “Puro filin”, entre otros.
Desde mediados de 1994, se decidió incrementar la programación musical en XEB, con el concepto de música romántica en español y boleros tanto clásicos como en sus interpretaciones más modernas.
Del año 2000 al 2001, XEB transmitió los siguientes programas: “Desde mi tierra Yucatán”, “Fátima directo”, “La voz de una mujer”, “Por los andenes de la cultura”, “Primera llamada”, “Días de contar”, “México a la vista” y “Por la vereda” (con Benito Romo de Vivar).
Durante el año 2003, el slogan tradicional de XEB fue “XEB, más grande que nunca”, y su propuesta musical se basó en el bolero, la balada moderna y la canción pop. En esas fechas, Ángel Dehesa Christlieb era el gerente de la emisora.
En marzo de 2005, se reestructuró la programación para mantener el equilibrio entre los programas de contenido y los musicales. La nueva imagen tuvo por nombre: XEB, la B Grande de México, El Buen Tono de la Radio, parafraseando el slogan original de la emisora. Jesús Flores y Escalante ocupó en ese año la gerencia de la emisora.
A partir de 2007, nuevos programas de contenido se sumaron a la programación de XEB: “Kilo por kilo”, “Entre nos”, “Crónica citadina”, “Vivir y morir en sábado”, “Baile por la salud”, “No canto pero me encanta”, “Lidiando juntos” y otros que se combinaron con los espacios musicales, integrados por música de catálogo en diversos géneros.
A partir de 2007, nuevos programas de contenido se sumaron a la programación de XEB: “Kilo por kilo”, “Entre nos”, “Crónica citadina”, “Vivir y morir en sábado”, “Baile por la salud”, “No canto pero me encanta”, “Lidiando juntos” y otros que se combinaron con los espacios musicales, integrados por música de catálogo en diversos géneros.
El 17 de septiembre de 2012, el IMER dio un paso histórico en la radio mexicana, al inaugurar nueve señales digitales; una de ellas fue asignada a XEB, que desde ese momento comenzó a transmitir simultáneamente en Frecuencia Modulada, a través del 94.5, en el canal HD2.
XEB celebró 99 años de estar al aire el 23 de septiembre en el Museo Nacional de Culturas Populares con música veracruzana y romántica.