No cabe duda que correr está de moda. Esta actividad puede brindar grandes beneficios a la salud, pero también puede representar algunos riesgos. Hay personas que ya sea por su trabajo, porque no tienen tiempo o por puro placer, prefieren hacerlo en la noche.
Salir a correr de noche es algo con lo que debemos tener cuidado, pues la baja visibilidad eleva la posibilidad de sufrir un accidente o un hasta un asalto.
Relajar la mente es uno de los grandes beneficios de correr, pero tampoco hay que relajarla demasiado. Debemos estar alerta, pues por más alumbrado que esté el parque o la calle, en la noche es difícil distinguir objetos, animales y gente.
Otro consejo es siempre usar una ruta conocida. La noche no es un buen momento para explorar nuevos caminos. Sin embargo, también es buena idea no seguir la misma ruta cada noche. Lo ideal es establecer varios caminos para regresar a casa.
Nunca corra en el mismo sentido que los autos. Tener a los autos de frente mientras se corre no sólo les permite a los conductores vernos fácilmente, sino que también es más fácil solicitar ayuda si tienes algún tipo de problema.
Si va a entrarle definitivamente a la caminata nocturna, es buena idea comprar vestimenta especial para la ocasión, ya sea tenis con reflejante o playeras de colores llamativos o brillantes.
Si usted es de los que no pueden correr sin música, use sólo un audífono y deje libre el otro oído para escuchar lo que sucede en el exterior.
Algo muy importante al salir a correr es llevar una identificación, ya sea la licencia, la credencial de elector, o una placa con sus datos, ya que es importante contar con algún tipo de identificación en caso de sufrir algún accidente.
Por último, si ya corrió, no se pare en el puesto de los tacos que se le van a antojar.