Desde hace casi 100 años, el 30 de abril se conmemora el Día del Niño en México, por lo que muchos papás buscan consentir a los pequeños del hogar con un bonito regalo. ¿Pero qué hacer si nuestros hijos nos piden algún juguete bélico?
Muchos padres dudan o se alarman cuando sus hijos les piden una pistola, espada o algún otro juguete bélico.
En este asunto, hay dos teorías, muchos expertos, creen que un arma de plástico no tiene por qué inclinar al niño hacia la violencia, ya que gracias a este juguete, descarga su agresividad simbólicamente, sin ningún tipo de agresión real.
La otra parte, se opone tajantemente a este tipo de juguetes, ya que para ellos, regalar un juguete de estas características a nuestros hijos, implica que violencia y guerra nos puede parecer bien como forma para solucionar los problemas.
Hay algunos consejos que los especialistas dan a los que suelen regalar este tipo de juguetes.
Por ejemplo, a los niños hay que enseñarles claramente las diferencias entre una violencia simulada y una real, totalmente diferente es disparar jugando y disparar de verdad. El ejemplo más fácil es con una inyección. No es lo mismo jugar a médicos y que te pongan la inyección a que te la pongan de verdad.
Cuando los niños juegan, despliegan una gran cantidad de energía que incluye una dosis de agresividad controlada, estos juegos son normales para su desarrollo y además necesarios para su desarrollo emocional, pero hay que tener presente que los juguetes no deben influir negativamente en el niño. ¡Tú decides como educar a tu hijo!