Con la presentación de una canción inédita de Don Chava “Café Rock”, interpretada por Beto Mendoza, músico, guitarrista y buen amigo de RMI. Esta pieza fue rescatada por una de las hijas del compositor y forma parte de un espectáculo preparado por la Escuela Nacional de Danza Folklórica.
El 14 de enero de 2016 el gran Salvador Chava Flores, habría cumplido 96 años y por esa razón en RMI decidimos hacerle un pequeño homenaje, buen pretexto para llenar nuestra mañana con su música, con sus relatos y con su recuerdo. Y es que acudir una y otra vez a las canciones de Chava Flores es un placer. Sus crónicas retratan un México de tiempos pasados que no deja de estar presente y esto nos entusiasma y vuelve a sorprendernos una y otra vez por la inteligencia y agudeza de su rima, la vitalidad de su música y la variedad inmensa de su producción. Chava vivió una infancia muy modesta y en su juventud desempeñó un sinfín de oficios y trabajos que le sirvieron para ayudar a su madre viuda en el sostén de la familia. Después, con sus canciones, logró alcanzar éxito y fama, pero nunca perdió el aire de sinceridad y sencillez que le permitía mantener una relación cordial y cercana con el público que acudía a sus presentaciones.
Las canciones de Chava Flores siempre están presentes en la programación de RMI, pero con motivo de este homenaje nos dimos un banquete: “La esquina de mi barrio”, “Dos horas de balazos”, “El retrato de Manuela”, “Los Quince años de Espergencia”, “El bautiza de Cheto”, “Llegaron los gorrones”, “Sábado Distrito Federal”… Eso y mucho más sonó en nuestra transmisión, intercalado con los comentarios de nuestra conductora Rita Abreu y la lectura de algunos fragmentos del libro “Relatos de mi barrio” de Chava Flores, publicado, hace ya algunos ayeres, por Ediciones Algeste. Pero la cereza de nuestro pastel de homenaje a Chava Flores fue la presentación, en vivo, de una canción inédita “Café Rock”, que pudimos oír gracias a la reunión de una serie de afortunadas casualidades porque se encontraba en el IMER Beto Mendoza, músico, guitarrista del grupo “Imaginasón” que grabó esta pieza (que les fue entregada por una de las hijas de Don Chava) para un homenaje con tres funciones realizado en estos días por los alumnos y alumnas de la escuela de Danza Folklórica. Queremos invitarles para que acudan a la última función de ese homenaje, hoy viernes 15 de enero en el Teatro de la Danza, atrás del Auditorio Nacional. La entrada es libre y comienza a la una de la tarde.
Fragmento de “Relatos de mi barrio” de Chava Flores, Ediciones Algeste.
“Nací el 14 de enero de 1920 en una de las calles de La Soledad, allá por el rumbo de La Merced en la ciudad de México D.F., cuando aún era presidente de la República don Venustiano Carranza a quien no tuve el gusto de conocer… No sé por qué, tal vez porque mi papá no pagaba la renta a sus debidas horas, el caso es que durante mi infancia recuerdo mil domicilios diferentes. Viví en todos los barrios que en ese tiempo formaban la totalidad de la ciudad e inclusive otros que se salían de ella: Peralvillo, los Doctores, Roma, Romita, Juárez, Cuauhtémoc, El Carmen, Santa María la Ribera, Santa María la Redonda, San Rafael, Tacubaya, Coyoacán, etc., etc. y etc. Y si no viví en el Castillo de Chapultepec fue porque en ese tiempo, discriminatoriamente, sólo lo “alquilaban” al que fuera presidente de la república; pero si ahí hubieran existido disponibles dos cuartos con baño y cocina, les juro que papá hubiera hecho lo imposible porque los habitáramos… Para 1932, yo vivía en las calles de Guillermo Prieto 126, interior 5, una vecindad que ya no existe y que estaba separada del barrio de Santa Julia por lo que, durante mucho tiempo, fue el famoso Río Consulado. De esa vecindad mis recuerdos brotan como las chipas saltan del carbón ardiente, y aunque en ocasiones queman por su misma naturaleza, si se les mira con la atención debida son tremendamente hermosas.”