El nombre de Ricardo Flores Magón quedó guardado en la memoria histórica de nuestro país como uno de los precursores de la Revolución Mexicana. Su vida inició en Oaxaca bajo el cobijo de una familia liberal, y fue el segundo de tres hermanos, que desde muy jóvenes se revelaron como opositores al gobierno de Porfirio Díaz.
La crítica porfirista de Ricardo Flores Magón se manifestó, principalmente, a través de periódicos como “Regeneración” y “El hijo del Ahuizote”. A pesar de los constantes arrestos y del exilio, los ideales de Ricardo nunca mermaron y su actividad revolucionara continuó desde Estados Unidos, donde finalmente murió encarcelado en 1922.
Es considerado como héroe del movimiento de 1910, de ahí que el nombre de Ricardo Flores Magón está inscrito con letras de oro en el Muro de Honor del Palacio Legislativo de San Lázaro.
A 100 años de su fallecimiento, el IMER le rinden homenaje a través de dos series capsulares: